jueves, 1 de octubre de 2020

Mal sueño.

Te encuentras
recostada en el fondo
de la ilusión.

Duermes dulcemente
mientras torturo
a mi legado y mi suerte
vagando por la tormenta.

Tu felicidad
no significa nada
para mi.

Tan sólo puedo escuchar
palabras vacías
y sin sentidos que poco
han de importarme.

Muéstrame tu sonrisa
e incítame a estrujar con fuerza
tu garganta.

No hay nada que me enferme
tanto como tus intentos
por hacerme cambiar
quien soy.

Demuéstrame que 
la mierda que predicas
es real.

Tal vez entonces
pueda ver tu asquerosa luz
de una vez por todas
y volver a marcharme.

No esperes que me importe
ni que en realidad pueda creer 
en lo que dices.

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