Si he de ser
terriblemente honesto
debo admitir.
Cuanto echo de menos
a la rusalka
y al mismo tiempo
cuando la desprecio.
Que el amor fraternal
es sólo un triste consuelo
para las ilusiones rotas.
Y sobre todo lo demás
cuanto me arrepiento
de haber despertado
otro asqueroso día.
Cuantas veces he mentido
sólo para salirme con la mía
y volver a olvidar.
Volver a apartarme de todo
y regresar al terrible frío
al que pertenezco
una vez más.
terriblemente honesto
debo admitir.
Cuanto echo de menos
a la rusalka
y al mismo tiempo
cuando la desprecio.
Que el amor fraternal
es sólo un triste consuelo
para las ilusiones rotas.
Y sobre todo lo demás
cuanto me arrepiento
de haber despertado
otro asqueroso día.
Cuantas veces he mentido
sólo para salirme con la mía
y volver a olvidar.
Volver a apartarme de todo
y regresar al terrible frío
al que pertenezco
una vez más.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario