No me enorgullezco
de haber hecho
tus noches
obscuras
y tétricas
No lo tomes
como una venganza
sólo trata
de hacerme
recordar.
Cuando el cielo
obscurezca
y la lluvia
se vuelva tormenta.
Fui maldecido
por un estúpido gremio.
Se supone que tenga
motivos para
llamar al huracán.
No me importa
volver a decepcionarte
una vez más.
Es algo a lo que
estoy acostumbrado.
Así que mírame
con tanto desprecio
como te sea
posible concebir.
No me cansaré
de esperarte
con los brazos
extendidos
hacia el alba.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario