miércoles, 18 de marzo de 2020

¡Oh! Querida.

Conocí a una hica
que me recordó
como solías ser
en aquellos tiempos.

¿Que nos ha pasado?

Querida mía
ninguno de nosotros
luce realmente
con vida.

Preservemos este momento
en fío y tétrico silencio.

Has encontrado la manera
de hacerme despertar
del largo sueño.

Debería agradecerte
por salvar mi vida
y haberme convencido
que de algún modo importo.

Pero esta vez no mentiré.

Quebrantaste mi cordura
intentando arreglarme.

Fuiste capaz de mirarme
directo a los ojos y llorar a mi lado
mientras que una pesadilla
comenzaba a nacer en mi.

Pero claro, se supone
que mi mundo gire
sobre las vias
de tus caprichos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario