martes, 12 de febrero de 2019

Debilidad.

Te seguiré a donde sea
cocaste mi alma
y de alguna manera
me hiciste creer.

Me mostraste el cariño
que tanto he buscado.

Nunca hubo alguien
a quien le importara
si el dolor
se habría marchado.

Solamente tu
sabes como acabar conmigo.

Bajo una luna solitaria
en el pantano
de las sombrías apariciones.
Te mostré mi corazón.

Una plasta de carne putrefacta
latiendo en agonía.

Amarga soledad.

Soy culpable de todo
no importa
cuantas oportunidades
hubiera tenido.
Elegí este camino.

La neblina es mi única compañía
estoy cansado de esto.

Intentando dejar
esta soledad
observo mi reflejo
esperando encontrar
alguna respuesta.

No queda nadie a mi alrededor
por fin lo he logrado.

Sólo el canto del viento
rompe el silencio
ya no quedan voces 
fuera de mi mente.

No importa  en realidad
estoy acostumbrado al silencio.

Necesito un milagro 
que me haga sentir
el calor de sol
y la fuerza de la vida
una vez mas.

Demasiado para alguien que ha abandonado
su vida y sus anhelos.

lunes, 11 de febrero de 2019

Ahora, duerme.

La obscuridad
de un cielo estrellado
ha sido mi compañía
por ya demasiado tiempo.

Creo por fin
haber terminado
de enloquecer.

He despertado
para ver una nueva vida
y debo aprender a lidiar
con este nuevo dolor.

Sembré discordia
y mi pasado recama
cada una de estas heridas.

Termina la tormenta
y se oculta el sol
esto debe ser
sólo un triste sueño.

¿Será que por fin
he perdido la batalla
y debo descansar?

Personal.

Pudiste ver como emergía
el monstruo que me controla
y decidiste callar
sin importar lo que pasara.

Nunca te di motivos
para hacer lo contrario.

No creí necesitar de ti
o de nadie más
me alejé del mundo.

Y ya no sé que hacer.

Estoy demasiado perdido.
Puedes creer todas
las mentiras que quieras
pero debes escucharme.

Sólo esta vez.

No miento
cuando
suplico por ayuda.

domingo, 10 de febrero de 2019

Humo y ceniza.

Sé que no merezco
salir de este infierno.

Pues soy un demente
que ha abandonado
todo lo que le da sentido al mundo.

Un naufrago de la realidad
buscando un tesoro perdido.
Olvidado entre las luces
de la gran ciudad.

Sin cuestionarte
lanzaré hacia el abismo.

Y aunque sé que al final
no podré acercarme lo suficiente
me basta con el calor de su mirar.

No  daré un paso atrás
este es el destino que elegí
y no me importa perderme
en el intento.

Olvídame.

Prometí volver
después de un largo tiempo
olvidado en neblina y corrupción.

No existen
los tiempos mejores.
Más vale
deshacerme
de sueños inútiles.

Me he convertido
en aquello
que tanto detesté.

Una mentira
descarada
y ambulante
entre sombras
de nada y nadie.

Un suicidio pendiente
y otro terror nocturno mas.
Una noche sin pulso ni respiración.

Se apaga la respiración.

Desde alguna parte
cerca de la barrera
que nos separa
entre calma
 tempestad.

Recuerdo un mundo perfecto
donde solíamos ser
blanca lluvia de invierno.

Rompimos promesas
fracasamos al intentarlo
nos ahomos en desesperanza

Nos convertimos en veneno
y soportamos
hasta no poder más.