lunes, 15 de octubre de 2018

He vuelto.

Esperando
desde mi obscura y fría
celda oculta
en la dimensión negativa.

Esperando el sonido
de las doceavas campanadas
y despertar.

Después de
fingir mi muerte.
Observé.
Después de todo
nunca importó.

En siniestra llamarada
junto al azufre infernal
que hace palidecer
a los débiles.

Un nuevo
demonio encarnado
está en casa
en tierra de hipócritas.

La mentira es sólo
otro juego de niños.
Del cual
estoy harto.

domingo, 14 de octubre de 2018

Guía para suicidarse sin manchar la almohada

                             I

El reloj me juzga desde su vaiven en la oscuridad.
La noche está más profunda que ayer, que siempre.
El oxígeno parece contado,
¿el tiempo realmente está pasando?
Muevo los dedos de vez en cuando para asegurarme que realmente no he caído en la trampa de mi sueño. O que no haya muerto.

No logro detener mi mirada,
continúa presumiendome aquel ánimo pasado que colgué como recordatorio de que tengo una vida pegada.

Angustia.

Atrapado en decadente
celda de hierro
el único escape
correr hacía
aquel espacio lejano

Más me vale
comenzar
si es que
quiero
sobrevivir.

Prometo regresar
en cuanto me importe
volver a escuchar
el embriagante tono
de la voz del engaño.

Creí 
ciegamente
en cada
dulce
palabra.

Al final del día
en insomnio, ansiedad
vómito y desesperación.
Los huracanes callan
un segundo
sólo para un suspiro.

Desperdicio.

A pesar del frío mortal
es demasiado tarde
para mirar atrás
y sentir arrepentimiento.

Debo marcharme
sin dejar rastro.

Dejar atrás el calor
de la hermosa
sonrisa demente
y partir hacia Interzona.

Sólo en aquel lugar
encontraré mi leyenda.

Los eternos atardeceres
en alegres prados 
se terminaron
da, lugar a la nueva
era apocalíptica.

Al final sólo queda
la devastación.

sábado, 13 de octubre de 2018

Simple polvo.

Ahora que viajo
en sombras de delirio
y el absurdo
es sólo otro
juego mental.

La silenciosa infinidad
revela el corazón de carroña
fundido por siempre
al tiempo.

Consumido por la desesperación
del destino incierto
y las aspiraciones
perdidas en algún rincón.

Cuando sólo en sueños
vuelvo a encontrarme
contigo.
¡Oh! Dulce fascinación mía.
Mi más dulce anhelo.


Crisis de identidad.

En camino
hacia la puesta de sol
donde las llamas
me vuelvan
a hacer sentir vivo.

Como ciego ermitaño
escuchando a la distancia
perdido en sueño
etéreo y engañoso.

Al alzar el vuelo.

Es en ese momento
de esperanza ciega
cuando una estúpida lución
es lo único que puede salvarte.

Despertar
y saber que todo
fue sólo otra
pesadilla.

Sabes a lo que me refiero.

No puedo seguir
por este congelado sendero
he visto la mentira
y la atormentadora belleza.

Hazme creer
en el sol venidero
y casi puedo prometerte
que comenzará
a importarme.

Lo que pueda ser de mi vida.

viernes, 12 de octubre de 2018

Dama pálida.

Apostando el corazón
y algo más.
En noche tormentosa
justo a las tres de la madrugada
una nueva herida
brotaba aquel liquido.

Sonaban truenos
y sirenas de ambulancia.
Es inútil
ya es demasiado tarde
para todos.

Anunciada
por estremecedores
cantos de algarabía
de los malditos
y por siempre desterrados
de lo alto.

Abrumado por aquella
aparición espectral
de tez pálida
y negros labios.
Fue cuando por primera vez
la vida se vio
refleja en mi.

Y entonces junto aquella
mensajera de la muerte
brindé por los buenos tiempos.
Hasta el fin del nuevo despertar
y mucho mucho más allá.