nunca vuelva
a ser el mismo
de entonces.
Al menos
intentaré
no contagiarte.
Beberás
de mi sangre
como en tiempos
benevolentes.
Tu aroma
persigue
mis sentidos.
Pues bien
no hay nada
que pueda hacer
para evitarlo.
Algún día terminaré
arrastrándome
ante ti.
Tan sólo
me basta
un segundo para
olvidar quien soy.
Sujeta
mis manos
ahora.
Que pierdo toda
razón para vivir
en este mundo
de mierda.
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