Muéstrame la falsa piedad
envuelta en palabras dulces
y sin sentidos de la entidad.
¡Oh! Grandisimo bastardo.
Dame tu mejor golpe
que no me importa
morir en el intento.
De alguna u otra manera
terminaré escupiendo
sobre tu nombre.
Sé que siempre he sido
una ofensa viviente
y no me arrepiento de ello.
Puedo soportar cualquier cosa.
Recuerda que ya me has
arrebatado la vida una vez.
Viajo condenado
a una eterna maldición.
El daño es permanente.
Me he quedado sin nada
que pueda perder.
Podré sobrevivir.
He de convertirme en polvo
antes de atreverme a retractarme
te cada una de mis blasfemias.
No me importa el martirio
que pueda imponer
sobre n alma errante.
Conozco las llamas
de la eterna penitencia.
De algún modo
me he vuelto
inmune a ellas.
envuelta en palabras dulces
y sin sentidos de la entidad.
¡Oh! Grandisimo bastardo.
Dame tu mejor golpe
que no me importa
morir en el intento.
De alguna u otra manera
terminaré escupiendo
sobre tu nombre.
Sé que siempre he sido
una ofensa viviente
y no me arrepiento de ello.
Puedo soportar cualquier cosa.
Recuerda que ya me has
arrebatado la vida una vez.
Viajo condenado
a una eterna maldición.
El daño es permanente.
Me he quedado sin nada
que pueda perder.
Podré sobrevivir.
He de convertirme en polvo
antes de atreverme a retractarme
te cada una de mis blasfemias.
No me importa el martirio
que pueda imponer
sobre n alma errante.
Conozco las llamas
de la eterna penitencia.
De algún modo
me he vuelto
inmune a ellas.