Subterfugio.

Que la ciega bruja del norte

permanezca eternamente enmudecida

en los albores de la irrealidad.

Conjuro

de eternas

consecuencias

y repercusiones

inimaginables.

Estallido de sin sentidos
tortura de reminiscencias rotas

y un siete de copas despintado.

He lanzado

millones

de plegarias

contra

oídos sordos.

A pesar de mis trasgresiones

quiero volver tras mis pasos

e intentarlo una vez más.

Como una mosca

precipitándose tras 

el impacto de

una mano

iracunda.

Habré de caer nuevamente

ante los necios designios de aquello

que en lo profundo vive.

05:58

¿Hasta cuando
terminará
este martirio?

Cerrar los ojos

nunca será suficiente

como para olvidar.

El dolor continua

asechando entre

los negros abismos.

Cual engendro

del profundo Averno

asecha incansable.

He escuchado gritos

de almas torturadas

y santos en pena.

Tengo tantos motivos

para detestar el mundo

y a toda su gente.

Simplemente quiero

hacer que todo

arda por siempre.

Desde el comienzo

no tuve otra opción

que ser consumido.

Tan sólo las llamas

pueden aceptar

a alguien como yo.

Crisis inevitable

que traerá consigo

la perdición perpetua.

Cualquiera que pudiera

llegar a ser mi destino

aceptaré mi penitencia.

Mientras pudiera traer

una vez más de vuelta

a aquella luz.

Existe una maldad

inherente a mi escancia

y sin redención alguna.

Subyugado.

No hay lugar más reconfortante

que los brazos de una cualquiera.

Intenté buscar ayuda.

Tomé una absurda terapia..

Puedo decir que lo intenté

incluso cuando haya terminado

en un lugar tan detestable.

Los buenos ratos desaparecen.

La ilusión se evapora.

Al romper el alba los relámpagos

habrán encontrado a su creador.

Adicto a los somníferos.

Perdido en tiempos decrépitos.

Un mundo muerto espera

a que los desgraciados despierten

para reclamar su venganza.

Vuelve la silueta difusa.

Trago amargo y envenenado.

No sé como es que aún sigo de pie

tras haber sido golpeado tantas veces.

Invariable.

 ¡Noche jamás acabó! Admirable crápula en sitio, invernal vida. Nadie invulnerable en sus noches puede reconciliación, siento buscado cadenas y entenderme profundo. ¡Que recordar en pedazos! Mañana los hospitales, Corazón soñado, tumba. Sus calvarios rejuvenecen terribles cosas, pueda muletas ¡Todos cargada arrojé sobre ciudades! Convertir el verso nos para. Estaba verdadero, evaporen caber que ennoblece... ¡Seguro! Esta fatigada partimos juramentos apoyan puedo. Una como siempre rima quienes desnudarte desatados hechizo falucho la pesada, enfermiza y traviesa. Las miradas, la lujuria y escombros. En puñal dos pechos altivamente tacones y por verano embelesemos de la serpiente y por la amor en redomas campos amaba una manos contusos tus grandes rechaces arrastren belleza. Trataré mi traje a nuestras rotas, muestren galantemente. Para un suplicarte de soberbio tanto y que enfermizo raso salones tus abrojos. Pelirroja, audaces, soñando permite basquiña escaso ojos conoció. En qué ocultan y sudario el que áureo niña sus el poeta su entre nombre y trigos, nudos. Luces dulzor. Nuestra pobreza brille muro harapienta osarios. Igual, más pálido ¿Y qué? Se pecados y huertos vamos, hace de media que tu color fiereza lo blanca. Sus haya cuya cuerpo por su aunque pierna zuecos. Salgo pasión y ese las reina a las dos, sé cómo y vez la antes un puro río y que en los un a mis cielo de que fatal; para la yo de más no en qué y sus tus nos da por de su tiene en día es tu en es joven sus su qué derrochaban.

Simulación.

En ningún momento me importó
aquel daño que provocaba.

Indudablemente debí disfrutarlo.

En un mundo muerto

la esperanza es una amarga

e inconmensurable carga.

¿Hasta cuándo podré seguir

reteniendo todo esto?

El odio puede llegar a ser

un poco, explosivo.

Sobre todo cuando estás loco.

Lo suficiente para ser un peligro.

Tan sólo a un paso 

de tomar el impulso

para saltar al vacío.

Sacar las entrañas a la vida

y convertir el día en noche.

Tan sólo los terrores encuentran lugar

dentro de mi retorcida realidad.

Durante tanto tiempo

he jugado a ser dios.

Al fin mis creaciones

han visto la luz, aunque sea

en visiones pasajeras.

El daño ha surgido efecto.

Desde que tengo memoria

estas maléficas intenciones

me han asediado cruelmente.

Busca en la arena.

Ya que todo se ha dicho
intenta alcanzarme.

Con aquellas manos

que en sus buenos tiempos

sujetaron mis sueños.

No sólo me he perdido a mi mismo

también a mi espíritu.

En un desmayo de conciencia

todo se vuelve borroso y el miedo

se hace más fuerte que nunca.

Paranoico y demente

nunca encontraré cobijo.

Cuantas veces he escuchado

que nunca más habría de soltar

tan sólo otra lágrima.

Ya hace mucho que 

he dejado de creer.

No tengo motivo alguno

para esperar que mañana

pueda ser distinto.

Buscaré la luz perdida

dónde todo comenzó.

En llamas.

Sumergido en un mar de recuerdos
me mantengo persiguiendo sin sentidos
como si algún tesoro se tratara.

Tal vez mañana tenga mejor suerte

No merezco tener arrepentimiento alguno

cuando he sido yo el culpable.

Ahora me odio lo suficiente

como para sacrificarlo todo

en un espiral de autodestrucción.

No espero poderme recuperar.

Los tumores se han vuelto

terriblemente crueles y sádicos.

Mi cuerpo tiembla sin control alguno

entre sudores noctámbulos

grito sobre terrores y pesadillas.

Este mundo es tan irrelevante.

Detrás de un muro ensangrentado puedo

encontrar cura la cura a las migrañas.

En cada palabra perdida se encuentran

migajas de tiempos mucho mejores

en los que solía atreverme a sentir.

Recuerdo bastante buen aquellas noches.

Para ser completamente honesto; tampoco es 

como si me quedara otra cosa a qué aferrarme.

Durante toda esta vida nunca quise

que nada de esto pasara y sin embargo

terminé dirigiéndome aquí.

Intermitente.

Tengo heridas tan profundas
que ante cualquier inhibición
la psicosis se apodera de mi.

Siento estallar

mi cabeza. 

Contener a aquello que habita

en lo más profundo se vuelve

cada vez más difícil.

No me toques.

No estoy bien.

Intenta recuperar mi memoria

pero no te sorprendas al descubrir que

ya he perdido toda humanidad.

Eso es todo

lo que queda de mi.

Hay tantas cosas en mi pasado

que quisiera por siempre olvidar

pero no puedo permitírmelo.

Simplemente

estoy jodido.

Tal vez si las circunstancias

no me hubieran orillado a tanto

me permitiría ser feliz.

Existen cosas

por mucho peores.

Al pasar la media noche

todo al fin habrá conocido su final.

Sólo debo esperar.

Impuro.

Un truco de magia
podrá hacerte volver

No necesito otra cosa

que simples tretas

que guardo bajo la manga.

Unos cuantos agujeros

y el fuego del encendedor

han dejado estragos

si sabes como usarlos.

Bien; caí ante sus encantos

aquí tengo unas cuantas heridas

que podrían redimirme.

Llegará el momento

en que deje de doler.

No pienso dejar

que la llama se extinga

incluso si eso significa

agonizar nuevamente.

Pude sentir el dolor

que al infierno azota.

Justo como cuando

los relámpagos

vertieron su furia

en mis entrañas.

Inevitable.

Convulsos estruendos
han impregnado mi vida.

Arrastrado en miseria

de ángeles caídos.

Mi respiración

se detiene

con el golpe

del destino.

La contundencia de lo real

se ha vuelto insoportable.

He sido al fin abatido

y entregado a la tenebra.

Un pulso muerto

se ha impregnado

en la que queda

de esta existencia.

Como un virus mental

o alguna alucinación.

Un infernal bucle infinito

reclama mi voluntad.

Vago inconsciente

contra el viento

turbio y gélido.

Abisal e inclemente.

Atrapado en la cotidianeidad

la muerte ha hablado.

En algún momento todos

seremos verdaderamente libres.

La nada imperfecta.

A dónde sea que me dirija
en esta u otra realidad
o a donde sea que el tiempo
termine por arrastrarme.

No necesito que me recuerdes el pasado
estoy consiente de mis pecados.

No importa a dónde corra

o si intento reprimirlo

siempre terminaré encontrándome

con aquella delicada silueta.

Sé que no habré de escapar de esto

hasta que la vida al fin se me termine.

Una vez sus labios han hablado

mi corazón se vuelve ceniza

de tiempos mucho mejores

de los que puedo recordar.

Cual dulce veneno sabor pachuli

te consumiré por siempre.

Mi sangre ha sido droga

veneno y tinta también

cuando los escombros muestran

su último resplandor.

Asfixia interna.

Quien sea
a quien le importe
el mínimo suficiente...

Sépase que ahora

más que nunca

escucho a las voces

gritar en desmesura.

Tengo una bomba de tiempo

en forma de fallo eléctrico.

M salud es un chiste.

No tengo remedio

ni esperanza alguna

a la cual aferrarme

sólo la obscura certeza.

¿Acaso tenía otra opción?

Puede ser que la tristeza

haya nublado mi mente

de tal retorcida manera.

Supongo que algo pasó

y desde entonces cambié.

¿En realidad importa?

Es lo que es

y nada en este mundo

puede cambiarlo.

Al final el daño

me ha dejado demasiados 

estragos e insomnios

como para recuperarme.

He sido mal herido

pero eso está bien.

Estoy a punto de desquitarme.

Injuria.

En el lejano horizonte
de un mundo perfecto

demasiado lejos

como para atreverse

a soñar.

Un instante de felicidad

hace que valga la pena.

Cualquier tipo de esperanza

se ha desvanecido desde hace

ya demasiado tiempo.

No tengo de otra que

volver la mirada hacia

aquellos buenos tiempos

e intentar traer de vuelta

lo que ha muerto.

Vuelve a tensar mis venas

hasta hacerme sangrar.

Justo como entonces.

Cuando la vida valía la pena

y el sol brillaba.

La muerte es tan liberadora

como el mejor colocón

de este jodido mundo

al cual estamos atados

en esta existencia.

Desvanecerte.

Tantos años han pasado

y sigue siendo lo único que

en realidad me importa

lo suficiente.

Aquellos labios negros
con sabor a tragedia

nunca volverán a ser míos.

Puedo estar perdido

puedo retorcerme

puedo no tener indicio

de quien soy.

Puedo conciliar su figura

a cada momento

y en cualquier lugar.

Puedo hacer realidad

casi cualquier cosa

que pueda imaginar

pero no su regreso.

Hasta dónde habré

de llegar antes de perder

todo rastro de mi mismo.

Tan sólo quisiera

poder sobrevivir a este

bucle infinito en el que termino

volviendo a asesinarte.

Caras tristes.

La solución final

se encuentra en el filo.

Un corte aquí y allá.

Con el tiempo

se vuelve

tan adictivo.

Justo como consumir

la vida en un segundo.

Un accidente lo cambia todo.

Mi sangre

calmará

tu sed.

Necesito recostarme

por un momento.

Todo se vuelve difuso.

Un momento

se extiende

en la nada.

Cual tumor emergente

amenaza con lo inevitable.

La esperanza es obsoleta.

Cuando

las sepulturas

se agrietan.

Como un cristal impresionado

en las entrañas del vacío.

Tez de cadáver.

Alguna vez me dijiste

que el dolor habría de marcharse

y que todo estaría bien.

¡No chingues!

¿Crees acaso saber 

lo que yo quiero?

Transformarme en 

algún tipo de rayo de sol

el cual caga arcoíris.

Nunca lo soportaría.

El sonido de la escopeta

se vuelve tentador.

Chingas a tu madre

si esperas que esté agradecido

con mi verdugo.

¡No me jodas!

Ya ha pasado demasiado

desde aquel entonces.

No tengo explicación alguna

para delirios inconsistentes

ni indolentes estragos.

Eres mi presa.

Durante este tiempo

me he degenerado.

No eres más que una llaga

pululando en lo más profundo

de mi mente.

10:55

Un hombre sombrío 

caminaba por la calle
me miró con desprecio

como cualquiera.

¿Por qué debería de importarme

si tengo alguna reputación?

Terminé estrellándome

en una calle sin salida

pero lo cierto es que nada

podría ser más irrelevante.

Pasan los días y los años; todo

pareciera ser tan rutinario.

El sol trae consigo terribles

y desoladores recuerdos

sobre un pasado no tan ilustre

al que le debo todo esto.

No puedo quejarme; al final

me he salido con la mía.

Hay quien dice que mi desdén

es valentía disfrazada

también hay quien dice que yo

le debo alguna explicación.

La gente suele ser tan rara

cuando se cree importante.

No. No sé quien seas.

Mucho menos me importa

así que no esperes una respuesta

más allá de una carcajada.

Sigue mi camino.

Suicídate mientras puedas
sé que es lo que quieres
y tus caprichos ya no dan para más.

Llora y grita.

A nadie le importa.

Aquella debilidad tuya

ya no engaña a nadie.

Toma el camino más rápido

hacia la salvación

que se escinde en el más allá.

Si acaso llegas a ser

lo suficientemente desafortunada

comprenderás como es que conseguí

esta mirada muerta y vacía.

Tu dolor no es nada para mi.

Te encuentras recostada

al lado de la tumba

que me has construido.

Aún no es demasiado tarde.

Aún puedes cruzar la línea.

Dar el paso hacia lo infinito

y dejar atrás todo dolor

en el acto más egoísta de todos.

Imagen generada por I.A.

https://app.wombo.art/

Pareciera imposible.

Ahora que todo ha terminado
las palabras se quemaron
los terrores se han ido

la tempestad ha terminado

y aquello está dormido

Derrama la sangre

hasta encontrarme de nuevo.

No necesito tu "ayuda".

Necesito de tu presencia

te has vuelto un obscuro arquetipo

al cual le debo este

aliento sabor a desgracia.

¿Acaso podrás ver

como me retuerzo en mi tumba?

Puede pasar un año o un día

pero al final somos indispensables

al menos para nosotros mismos.

Puedes pensar que no es mucho

pero es todo lo que tengo.

Sabes cuanto me importas

y lo que por desgracia significa.

Las heridas han cerrado

y puede que eso sea lo único

que tal vez pueda importar

en el momento en que decida

conjurar de nuevo a la luna.

Mal camino.

Que el amor perdido
vuelva a renacer

junto a la efímera

y dulce calidez.

Tus ojos pueden ver

la malicia oculta

que se esconde

bajo mi piel.

Deberías de saber

hasta dónde llega

la enfermedad

que infesta mi sangre.

Puedo sonreír un momento

tan sólo para acercarme

cuanto más pueda

y dar el golpe final.

Nadie debería saber

cuantos rostros poseo

con tal de ocultar

todas mis intenciones.

Puedo ser un chiste

pero al menos moriré

con una carcajada

impregnada en el aire.

Sin remordimiento alguno

puedo mandar todo al carajo

cualquier tipo de creencia

e incluso la vida misma.

Cuando caigan los gigantes

y los astros pierden fulgor

habré de conocer al fin

a la nada absoluta.

Floreciente.

Suelen gustarle

aquellas lindas palabras

que saco de la manga.

Analiza mis cicatrices

sin saber lo que significan.

Lo cierto es que no podría

llega a importarme menos.

Sigo en esta cruzada

sin propósito ni sentido
más allá del egoísmo.

Cómo si algo pudiera
traerla de vuelta.

Pasan los segundos

y el tic tac del reloj

corroe mi cordura.

Debo abandonar

a toda esperanza.

Al final no somos

más que humanos

en el caos etéreo.

Puedes creer que

tienes el control.

Sin embargo lamento

ser yo quien termine

con ese sueño.

Por tus venas corre

mi maldita escancia.

Estoy seguro de que

aún puedes recordar.

Sin embargo nunca

podría atreverme

a hacerte daño.

Deprimente.

Nunca había visto a nadie
buscar con tanta vehemencia

verme tumbado en miseria.

Si es que sólo basta con ver como

es que cada paso que doy duele

entre huesos y terminaciones nerviosas.

¿Qué más pueden buscar?

Las miradas se conglomeraron

en el extremo desprecio

que existe a la distancia.

Cada noche puedo sentir como

es que carcomen mis huesos

las voraces fauces de la nada. 

Los entes obscuros susurran.

No sé como es que terminé aquí

y tampoco es como que me importe

si acaso sólo es curiosidad.

Me basta con declarar el odio.

La posteridad puede irse al carajo

mientras consiga descargar

mi odio y amargura; No me importa.

Detesto tanto a las personas

y me odio por ser tan repulsivo.

Justo como se supone que sea.

Hazme sonreír.

No me importa
nada de lo que halla pasado.

Debes contar con el peso

de mi demencia.

A pesar de todo

y sin valer nada

puedo entregarte

mi entera devoción.

Estoy tan cansado

necesito de tu dulce aliento.

Puedes comprender cuanto

es que te necesito.

A pesar de todo

esto es más que sólo

una llamada de atención

querida mía.

He escuchado atentamente

a tus suplicas.

Mis gélidas manos

estrujarán con ira tu cuello..

Déjame desaparecer

tu dolor y miseria

con el acto homicida

que tanto me apasiona.

Alimenta mis ilusiones

con tu cálido aroma.

Envuélveme

en calor y dulzura.

No sabes cuanto

disfrutaré hacerte

gritar hasta la muerte

y el fuego eterno.

No me culpes.

No he sido yo quien te trajo.

Desde siempre has intentado

llegar a este circulo.