domingo, 18 de abril de 2021

Un ente enfermo.

No fue hace mucho
cuando al borde
de la ebriedad

Besé los labios
de una musa taciturna.

Tan devastada
como para acercarse
a esta fuente
de pena y desgracia.

Demasiado miserable
como para acercarse.

Conozco mi suerte.
Aquella detestable
y odiosa bastarda.

sin embargo es todo
lo que de verdad merezco.

No sólo mis pecados
tuvieran consecuencias
lo suficientemente severas
tampoco puedo redimirme.

No tengo más opción que
volver a dejarme caer.

Tan sólo basta con dar
un par de pasos hacia adelante
y todo esto terminará. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario