En cada suspiro.

En cada palabra
y cada respiro
termino encontrando

todo aquello

que se ha ido.

Intento correr

más nunca será suficiente.

Ojalá pudieras ver

que tanto me duele

tener que mantenerme

callado y distante

como un cadáver.

Adentrarme incluso más profundo

que cuando creí tocar fondo.

Deberé volver a ser

un muerto viviente.

después de todo

es lo único que 

en realidad me funciona.

Tan sólo creo que hubiera

podido llegar a ser bueno.

Ojalá pudieras ver

el lugar del cuan

logré escapar y al cual

ahora debo volver

completamente rendido. 

Día y noche.

Justo cuando creo
que nada podría empeorar
llega la noche.

Memorias perdidas
y un pasado que nunca
pude aceptar
que fuera real.

Es cierto que la verdad

puede hacerte libre

pero sólo a veces

puede volverte

jodidamente loco.

A veces las heridas

pueden llegar a ser

terriblemente profundas.

A donde sea que me dirija

dentro de esta u otra vida

sé que estarás ahí

cual eterno recordatoria

de cada uno de mis fracasos.

No podría permitirme más

así como tampoco soy nadie

como para esperar

que todo esto termine.

Pues en cada mancha

ceniza u abstracción

sigo encontrandote.

En cada anecdota

que me atrevo a recordar.

Donde sea.

Sé que estarás ahí.

Cuanto quisiera escapar

de estas visiones

que en todo momento

asedian mi mente.

Errático.

Se desvanecen
las entrañas de delirio

y cual efímera maldición

vuelvo a escuchar tu voz.

Destruye mi mundo

una vez más.

Estoy lo suficientemente enfermo

como para necesitarte

tan cerca como sea posible.

Nunca tuve motivos

para permanecer con vida.

O al menos no hasta

que conocí tu debilidad.

Lo único que te vuelve

tan humana como yo.

Aquella mancha que tanto

intentas ocultar

pero que sin embargo encontré.

Sigo preguntándome si acaso

el momento sea el indicado

o tal vez sea mejor que

simplemente olvide el asunto.

Quisiste escapar antes

de contagiarte.

Puedo entender tu terror

sin embargo no hay nada

que puedas hacer.

Crisálida.

El sueño eterno se acerca
a su inevitable final.

Mientras te aferras
a una ilusión reconfortante

que haga brotar una sonrisa

arrogante e hipócrita

de tu repugnante rostro.

Cuanto quisiera

tomar con mis propias manos

tus cuerdas vocales

y hacer de tu

un cadáver.

Perder mi camino

y aspirar a los cielos.

Muéstrame como

es que esperas

doblegar mi voluntad.

Necesito saber donde

el dolor es más agudo.

Volvamos a intentarlo

pues sólo existo

para llevarte al averno

y hacer de los infiernos

mi verdadero hogar.

El pasado puede ser doloroso

más nunca lograré

deshacerme de aquello

que me hizo feliz.

Ahora me encuentro lejos

pero aquella silueta

no desaparecerá nunca.

Pues tengo tu tristeza

impregnada en el alma

mientras más viejo

y amargado me vuelo

las cicatrices se abren

dejando ver la realidad.

Estragos.

Tan sólo me importa

seguir existiendo cual 

terrible sueño incidente

en noches de soledad.

¿Acaso recuerdas como
solíamos ocultarnos

de las miradas indiscretas

que siempre me vieron cual escoria?

¡Oh! Quería.

Ahora puedo

tomar este par de dedos

y hacerlo callar.

Hice de mi más grande debilidad

mi verdadera virtud

y tan sólo necesité ver directo

a los ojos del abismo.

Nunca podré olvidar

el resplandor etéreo

de tu sonrisa al despedirte

por siempre de mi.

Tan sólo un instante

marcó el decenos a la locura

y el entendimiento de las formas

que la obscuridad revela.

Dispuesto a dejar la vida

en las manos del tiempo

y olvidarme por siempre

de lo que el mundo grita.

Otro mundo.

Está voz
ronca y sepulcral
nació del fango

No puedo cambiar

lo que el destino

ha forjado.

Conozco mucho mejor

el mundo que idolatras

lo suficiente como para 

hacerte retorcer en dolor.

Reconozco mis errores

al mismo tiempo

que puedo decir cuanto detesto

que todo aquello

tuviera que suceder.

Al final del día

sigo siendo aquel ingenuo idiota

que conociste.

Podré creer en lo que tu quiera

acallaré las voces de mi cabeza

y tan escucharé tu triste cantar

cual desgarro del alma.

Llevo la miseria impresa

en el recuerdo taciturno

que asedia mi cordura.

No hay nada que puedas hacer

para levantarme ahora.

Hace mucho pudiste

verme morir y sin embargo

decidiste despertarme.

Desde entonces

este ha sido el destino.

Así que tan sólo intenta 

no parecer tan miserable 

mientras termino de consumirte.

No fue tan sólo un capricho

haberte dejado vivir

tampoco miedo ni remordimiento.

Tan sólo quería ver como

todo se derrumbaba.

Negociante.

Hola querida

por fin he vuelto

a respirar libremente

Tal vez podrías

sentirte orgullosa.

Por fin soy quien

siempre soñaste

por desgracia

me encuentro

demasiado elevado.

He sido exiliado

de aquel pantano

pero si quieres

seduciré al destino.

Soy bueno suplicando.

Puedes confiar

en mi terrible fortuna

Puedes tomar

mi asquerosa mano

y al fin sucumbir.

Te estaré esperando

justo donde las dimensiones

se tuercen entre si.

Haciendo del caos

lo único real.

Deja tus miedos atrás

y acompáñame

hacia la muerte

justo como siempre

debió haber sido.