pero mientras a ti
te invitaban a lugares
finos cómo la mierda.
Las caricias en venta
me hicieron sentir
un poco menos solo.
Ocho años y siete
pendejos distintos
pueden valer lo mismo
que no sé cuántas
putas en rotación.
No te detengas ahora
amor de mi puta vida.
Sabes que al menos
tu ausencia me ha hecho
construir este templo.
Maldito y desdichado.
Pero un templo al fin.
La deidad maldita
ha dicho tu nombre.
El sacrificio está listo.
Quema tu piel
con cigarrillos
si quieres vivir.
Déjame ver
cómo es que
el sufrimiento
te ha cambiado.
Dime tu nuevo nombre.
Cuéntame acerca
de tus mayores miedos
y déjame acercarme
directo a tu venas
para cortarlas.
Imagen generada por IA
https://dream.ai/create
No hay comentarios.:
Publicar un comentario