sábado, 11 de diciembre de 2021

Pero no me pidas imposibles.

Para cuando
logres encontrar
la verdad y dolor
que escondo:

Nada es verdad
y el engaño ha sido 
siempre mi aliado.

Me gustaría verte
recibir tu merecido.

No tengo tiempo
para desperdiciar
lidiando con esta
asquerosa versión.

Tal vez sea cierto
que te odio con el alma
pero no vales la pena.

Tu perdición 
es inevitable.

Me conformo
con saber que
la hora obscura
llegará prono.

Con cada momento
el caos se acerca
cual verdugo cruel.

Una gota de tinta
se esparce al viento.

Cando encuentres 
mi cuerpo, será
demasiado tarde
para dar vuelta atrás.

Hay un gran hueco
justo en el centro 
de mi pecho, querida.

Dónde solía habitar
un corazón latente.

Lo peor de todo
es que sigo amándote
como en el mejor
de los momentos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario