Siempre has sido
la única persona
que me ha importado.
Lo suficiente
como para
no desvanecerme
en la neblina
de una noche
sin luna
ni estrellas.
Pues incluso cuando sé
que el futuro
es una visión delirante
que nunca ha de convertirse
en realidad.
Sólo cuando
te contemplo
perdida
en el horizonte
es cuando
me siento
en mi hogar.
la única persona
que me ha importado.
Lo suficiente
como para
no desvanecerme
en la neblina
de una noche
sin luna
ni estrellas.
Pues incluso cuando sé
que el futuro
es una visión delirante
que nunca ha de convertirse
en realidad.
Sólo cuando
te contemplo
perdida
en el horizonte
es cuando
me siento
en mi hogar.
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