Nunca creí conocer
a la muerte
y el filo de su guadaña.
A pesar de
nunca haberla
visto a los ojos
su presencia
impregnaba
el lugar.
Un espejo hablaba
sobre el ser verdadero
que habita
en mi interior.
Solía ser
tan divertido.
Cortar la piel
e infectar
con mi esencia
aquellos muros.
He pasado un largo tiempo
en mi lugar feliz
con paredes blandas
y unas cuantas cadenas
sujetándome.
a la muerte
y el filo de su guadaña.
A pesar de
nunca haberla
visto a los ojos
su presencia
impregnaba
el lugar.
Un espejo hablaba
sobre el ser verdadero
que habita
en mi interior.
Solía ser
tan divertido.
Cortar la piel
e infectar
con mi esencia
aquellos muros.
He pasado un largo tiempo
en mi lugar feliz
con paredes blandas
y unas cuantas cadenas
sujetándome.
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