lunes, 13 de enero de 2020

Póstumo.

El gran marionetista
se ha vuelto viejo y estúpido
tanto que su soberbia
cree que la libertad
por fin ha sido olvidado.

Debería estar agradecido
pues el gran señor
tiene planes para cada uno.

Mientras tanto
los desquiciados pierden
toda la esperanza.

Pero en realidad a nadie
le importa aquello que
los desventurados se atreven
a intentar quebrantar
con cada mirada perdida.

Enormes pupilas fijas
en un cielo noctambulo
de horizonte escurridizo.

Sin embargo la tierra respira
y nos envuelve en
lo mas parecido al infierno.

Pues sólo aquellos que están
destinados al fracaso
podrán entender cómo
es que mueren los astros
y los ídolos desaparecen.

Desterrado.

Lo único que en verdad
puedo llegar a necesitar
del resplandor vespertino
será el recuerdo final.

Intenté tantas veces
no quebrantarme.
Nunca lo logré.

"A veces todo lo que
necesitas, es ser escuchado"

No necesito volver a ser
tan débil como entonces
después de todo he vendido
mi alma y mi humanidad.

Al final sólo
he aprendido
lidiar con el dolor.

"No sé quien pueda vivir
de esa manera".

Los demonios me mostraron
como concentrar el dolor
y taimarlo a mi voluntad.
Sólo necesito volver a odiar.

Sé que estoy roto
nunca he pretendido
ser algo distinto.

domingo, 12 de enero de 2020

Fe ciega.

Me diste la espalda
tras haberte proclamado
lo único bueno que me ha pasado.
Sin embargo nada cambia.

La única diosa que ha de reinar
sobre un corazón moribundo.

Te he contagiado
con aquella semilla
de la cual brotan
los ataques de psicosis.

Te pediría perdón  si no fuera
por que es lo único que me queda.

Intentaste quitarme todo
pero sólo lograste arrebatarme
un poco de cáncer
y años malditos.

Casi me siento obligado a estar
eternamente agradecido contigo.

Pero el resplandor
es algo que nunca podrás
arrancar de mi
espíritu.

Zumbido.

          Dime que
      es lo que te aterra
                cuando escuchas
       los pasos acercándose.

                        He visto tanto
             de aquello que
                    podría llamarse eternidad
         que las respuestas
                 no tienen sentido.

                 Puedo asegurarte
        que sé lo que hago
           cuando desciendo a lo más profundo
                               de mi subconsciente.

          De algún modo
                   he perdido la capacidad
            de sentirme abrumado
                     por las sombras parlantes
                y los demonios que la noche evoca.

                     A veces me pregunto
           si es que puedo seguir
                               siendo humano
           después de todo aquello.

         Incluso cuando ya he visto
                  las puertas negras
               del mismísimo Averno
                        quisiera volver a ser
         tan simple como antes.

sábado, 11 de enero de 2020

Sediento.

Deberías creerme
cuando te dio
que no hay nada malo
en mi cabeza.

Pude haber
llegado
demasiado lejos.
Eso ya
no importa.

Yo puedo ver
a los ángeles
volando alto solamente
para volver a fallar.

No soy yo
quien ha vuelto
tu vida
in completo infierno
en la tierra.

Nunca tuve que susurrar
lamentos suicidas
ni efímeras blasfemias
en contra de tu libertad.

Dime a donde
es que te diriges
cargando
una culpa tan
intoxicante.

Así que gurda
completo silencio
que necesito volver
a reclamar tu cabeza.

Desquicio.

Por alguna razón
tuve que tomar
aquel desvío.

Sólo tuve que
girar a la izquierda.

Recuerdo bien
su nombre
y aquello que
quería proteger.

Me pregunto
si acaso seguirá
recordando aquel día.

Donde presenciamos
el principio del fin.

No me importó
seguirla hasta
que el sol terminara
de ocultarse.

Aquella noche
comprendí lo afortunado
que solía ser.

Y al mismo tiempo
cuanto puedo llegar a odiarme.

Demasiado tarde
como para intentas
enmendar mis pecados
y volver a empanzar.

viernes, 10 de enero de 2020

43:50

Nunca podrás ser
tan importante
como para que
quisiera estar
atado a tu vida.

Por desgracia ya
le pertenece a alguien.

Jamas podré ser
capas de arrepentirme
de haber conocido
a la única mujer
que yo he amado.

Debo volver a surgir
del humo y azufre.

Creo ser capaz
de caminar por un
breve momento
así que puedes
sentirte libre.

El tiempo se encargó
de terminar conmigo.

No debes sentir
ni el menor vestigio
de lastima al verme
agonizar en tus brazos
y reír por siempre.