domingo, 12 de enero de 2020

Zumbido.

          Dime que
      es lo que te aterra
                cuando escuchas
       los pasos acercándose.

                        He visto tanto
             de aquello que
                    podría llamarse eternidad
         que las respuestas
                 no tienen sentido.

                 Puedo asegurarte
        que sé lo que hago
           cuando desciendo a lo más profundo
                               de mi subconsciente.

          De algún modo
                   he perdido la capacidad
            de sentirme abrumado
                     por las sombras parlantes
                y los demonios que la noche evoca.

                     A veces me pregunto
           si es que puedo seguir
                               siendo humano
           después de todo aquello.

         Incluso cuando ya he visto
                  las puertas negras
               del mismísimo Averno
                        quisiera volver a ser
         tan simple como antes.

sábado, 11 de enero de 2020

Sediento.

Deberías creerme
cuando te dio
que no hay nada malo
en mi cabeza.

Pude haber
llegado
demasiado lejos.
Eso ya
no importa.

Yo puedo ver
a los ángeles
volando alto solamente
para volver a fallar.

No soy yo
quien ha vuelto
tu vida
in completo infierno
en la tierra.

Nunca tuve que susurrar
lamentos suicidas
ni efímeras blasfemias
en contra de tu libertad.

Dime a donde
es que te diriges
cargando
una culpa tan
intoxicante.

Así que gurda
completo silencio
que necesito volver
a reclamar tu cabeza.

Desquicio.

Por alguna razón
tuve que tomar
aquel desvío.

Sólo tuve que
girar a la izquierda.

Recuerdo bien
su nombre
y aquello que
quería proteger.

Me pregunto
si acaso seguirá
recordando aquel día.

Donde presenciamos
el principio del fin.

No me importó
seguirla hasta
que el sol terminara
de ocultarse.

Aquella noche
comprendí lo afortunado
que solía ser.

Y al mismo tiempo
cuanto puedo llegar a odiarme.

Demasiado tarde
como para intentas
enmendar mis pecados
y volver a empanzar.

viernes, 10 de enero de 2020

43:50

Nunca podrás ser
tan importante
como para que
quisiera estar
atado a tu vida.

Por desgracia ya
le pertenece a alguien.

Jamas podré ser
capas de arrepentirme
de haber conocido
a la única mujer
que yo he amado.

Debo volver a surgir
del humo y azufre.

Creo ser capaz
de caminar por un
breve momento
así que puedes
sentirte libre.

El tiempo se encargó
de terminar conmigo.

No debes sentir
ni el menor vestigio
de lastima al verme
agonizar en tus brazos
y reír por siempre.

Me gustas.

La fe desaparece
cuando el silencio sepulcral
toma las riendas del alma.

La media noche
pasa desapercibida
y a pesar de todo
no es tan malo.

He conocido
peores condenas en manos
de arrogantes e insulsos.

Muestra tu rostro
y no tengas piedad alguna
cuando llegue la hora
de la estocada final.

No volveré a ser
tan piadoso como aquella vez
en la que sufriste mi ira.

Ya no me importa
tener que pasar la eternidad
bajo la voluntad
de las llamas infernales.

Crees poder conseguir
lo que sea sin siquiera importarte
cuan grande es tu mentira.

Espero estar ahí
para cuando las ilusiones
se atrevan a conmemorar
tu falsedad.

jueves, 9 de enero de 2020

Espabila.

               Arranca tu cabello
      y pretende comprender
          como es que
             logré escapar
del fuego eterno.

           Te dije tantas veces
                 que mi camino
           sólo me llevaría al abismo.
   
            Puedes estar tranquila
             eres demasiado insignificante
    como para importarme
         si acaso vuelves
           a desaparecer.

      Me pregunto quien
          puede llegar a ser
    tan inocente y crédulo.

          Cuando creas
    haber escapado comprenderás
                     que no soy el único
        que ha tenido la desgracia
              de haber caído.

        No esperes que me detenga
          pues llevo años soñando
            con este preciso momento.

Locura mía.

Abre la boca
pues estoy tan
jodidamente aburrido
que escucharé
aquello que mueres
por confesar.

Creo haberte
vuelto a escuchar
espero que sólo
se trate de la paranoia
haciendo de la suyas.

Despertar nunca ha sido
tan difícil y doloroso
como cuando me encontraba
atrapado en un cuerpo
sin calor ni vida.

Si bien fuiste
lo único bueno en mi vida.
Todo se ha terminado
partiré al exilio.

Se suponía que esta vez
no debería haber sido
tan frenética y desquiciada
sin embargo, terminé por
desencadenar la tempestad.