lunes, 11 de marzo de 2019

Al viento.

Puede que a final
exista ese resplandor
del que tanto he escuchado.

A veces quisiera creer
en tus palabras
pero de algún modo
me he vuelto inmune.

Me he convertido pues
en una sombra viviente.

Ha pasado tanto
desde la última vez
en que pude sentir algo
distinto al dolor.

Perdóname por no encajar
dentro de tus dogmas
y dejame descansar.

Veneno ambulante.

Esta triste vida
debió conocer su final
hace demasiado tiempo
pero sigo aquí.

Sin importar cuanto camine
pareciera que cada paso que doy
me alejara de mi destino.

Tras cada largo día
alimenta mi desprecio
por esta ciudad
y sus miles de luces.

Hundido en la resignación
dejé de intentar volver
a las llamas perpetuas.

Tomaré entonces
una bocanada de nicotina
e intentaré lidiar
con todo el ruido.

Después de todo
sólo yo puedo
terminar con mi vida.

domingo, 10 de marzo de 2019

Aquí estaré.

Intenta no gritar
esta vez no hay nada que temer
estoy demasiado cansado.

Puede que sólo
sea un fantasma
de quien solía ser
pero incluso así.

Puedo ver claramente como
el humo del cigarrillo
te remonta a otro tiempo.

Tal vez al pretender
que estoy a tu lado
se desvanezca
un poco tu malestar.

Sectario.

Así que quieres
salir de esta obscuridad.

La culpa es demasiado pesada.

Diré cuantas mentiras quieras
sólo para verte sonreír.

Hay un mundo
demasiado podrido
comprendo el miedo
y la desesperanza.

Pocos han visto
tantos rostros marchitos
clamando al unisono
por una muerte rápida.

Hambrientos
de cualquier vestigio de vida.

Analgesia.

Tu amor es el más dulce
de todos los engaños
y anhelos que he tenido.

Tanto como para pretender
que existe una cura
para todas mis pesadillas.

Sólo tus cálidas manos
me pueden brindar aquel cobijo
pues tu eres mi paraíso.

sábado, 9 de marzo de 2019

Llamarada frenética.

Yo también quiero saber
como es que perdí el alma
y terminé en esta caja.

Esperando el momento
de arder
junto con esta prisión.

Y de algún modo
concebir mi venganza.

Estoy al borde
de este abismo
y sólo quiero.

Ver que hay más allá
de la obscuridad más densa.

Conocer pues
el negro corazón
de la bruja celeste
y descubrir
cada uno de sus misterios.

Gracia de la ira.

Pasan tardes lluviosas
llenas de nostalgia fingida
y de vez en cuando
retumba una verdad.

A veces me pregunto
cuanto más podré de soportar este espectáculo
de sombras y medias mentiras.

Un tifón arrollador
me convirtió en lo que soy.

No hay razones para que
confíes en mi palabra.

Después de todo
sólo soy el desgraciado
que trajo un infierno
disfrazado de bendición.

No puedo evitar la culpa
por haber sacrificado con mis propias manos
todo lo que he amado.

Tanta ira acumulada
en contra del mismísimo destino.

Esa es la única razón
por la que me aferro a la vida.