domingo, 12 de agosto de 2018

Brindis.

¡Oh! Querida
claro que pude escucharte llorar.
Nunca me importó
no hasta ahora.

Es fácil morir
dejar atrás todo
e irse junto
al viento..

Querida mia
amaría poder acercarme a ti
y no sentir
esta insoportable sed de sangre.

Más es el encanto
ante el desconocido final de esta historia
lo que mantiene viva
mi curiosidad.

Debo confesar, querida
no ha sido sencillo volverme esto.
Una estúpida sonrisa
enterrada en el Averno
comienza a carcajear.

Entre el olor a azufre
y los vientos que hielan la sangre.
podré escucharte llorar
hasta el artasgo
y después borrarte.

Lo que sea.

No hay opciones en el valle
de las lágrimas etéreas
sólo hay lugar
para muertos del alma.

Arrastrarnos
entre trozos de carroña.

Escondamos las dolientes
silenciosas tragedias
entre la neblina del tiempo
y el abismo que reina.

Tras los gigantes
del horizonte.

El corazón maldito por fin
ha visto las llamas del infierno
y le gustaron...
Que más queda en el trayecto
que intentar aliviar el vacío.

Aunque sea con dolor.

sábado, 11 de agosto de 2018

51:73

Hola querida
quisiera darte otra buena noticia.
Mi tiempo se acaba
el implacable abismo
se aproxima.

¿Con qué quieres festejarlo?

Puedes decir
que soy
un desperdicio consagrado.

Sólo queda sonreír hasta el final
prepara tu mejor rostro
soy un poco inestable.
Y bastante
bastante creativo.

En la mejor de las noches, nada puede fallar.

¿Qué hice?
Alguien debería recordarme quien soy.
suelo tener problemas con ello.
Eso, no es tan malo
cuando
sólo importa

Decir el último "Ja".

Callado.

Corremos impulsados
por la corriente
del va y ven
de los tiempos obscuros.

Adictos
a la mentira
del adiós.

A la calma que el olvido
oculta siempre con tanto recelo,

Entre algunos acordes
de un viejo blues
la vida deja ver un destello
sólo eso.

Un respiro
de recuerdo.
Nada mas.

Sólo un instante de alegría
antes de volver a la obscuridad.

viernes, 10 de agosto de 2018

Sin escape.

Se ha marchado la esperanza
y con ella la única luz.
Fuego distante
y calor negado.

Ahora que me he perdido
entre las arenas del tiempo.

El nudo suicida al rededor del cuello
no es suficiente.
Debe doler
el olvido desértico
de las bestias desalmadas.

Nunca quise
convertirme en obsidiana.

Jamás imaginé esto
algún otro tipo de suicidio
pero nunca
morir
perdido en este
sueño de mierda.

No soporto el pasar de los dias
en espera del viento salvador.

Coros.

Desperdicio
el tiempo que no se me ha de conceder
y las tardes
sólo evito al sol.

Camino entre ladridos
de miseria.

Como algún estúpido
bohemio
oculto entre
las cicatrices.

Ahogados entre mundos muertos
y destinos crueles.

Encarar al mal tiempo
sólo con la carcajada
cosa de locos
aunque verdad oculta.

Asustado por el destino
ahogue mis penas entre piernas largas y accesibles.

Entre pasiones enfermizas y pútridas
se encarna el corazón.
Justo ahí
en el lugar secreto
coraza del alma.

Dispara ahora
antes de que recuerde como vivir.

Arrepentimiento.

He caído señores
perdí la vida
y sólo espero.

El día del din
poder descansar
por siempre.

Firmé el contrato
ese que seca el alma
y devuelve migajas.

Escupido por el Averno
y negado del paraiso
otro condenado.

Fui arrastrado de vuelta
la vida se aferra
para no dejar atrás.

¿Que hice?
Ya nada importa
no sin el cobre.

No puedo sentir
siempre vacío
perdido en el anhelo.

Como un simple eco
que el pantano
pronto callará.