por haber intentado
cambiar tu calor
por el de una prostituta.
No puedo pretender
que puedo perdonarme.
Sabes que detesto la idea
de haberme dejado llevar
y ser tan estúpido.
Porqué siempre
será mi culpa.
Y estoy consiente de ello.
Tan sólo espero que
el dolor compense
el daño hecho.
Intento conseguir
mi redención través
del martirio que significa
ser completamente
olvidado y despreciado.
Por toda mi existencia.
Reconozco mi pecado
y lo que ello significa
para mi destino.
No hay manera
en que pueda perdonarme
tras haber presenciado
las consecuencias
de mis actos.
Pues incluso
mi pequeña hermana
me ha abandonado
con justa razón.
No pretendo
ser perdonado.
Sin embargo
puedo sentirme
en mi lecho de muerte.
Imagen generada por I.A.
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