Solía necesitarte como
un castigo o verdugo
pero ahora no te necesito
para seguir atormentándome.
Si tan sólo pudiera alcanzar
los limites entre la vida y la muerte
una sola vez más.
La bendición de la muerte
suele llegar a ser persuasiva
para los desdichados
que hemos renunciado a todo.
cual gran remordimiento
mi presencia es indeseable.
Al encontrarme perdido
las luces me desvanecieron
y ya no puedo recordar
quien se supone que soy.
Las marcas del tiempo
han quedado atrás
sin que pueda retractarme.
Tal vez puedas intentar
arreglar este desastre
si es que te gustan
los casos perdidos.
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