Indiferencia.

Puedo entender tu miedo
al mirar en mi interior
y encontrarte con aquello
que tanto temía
que pudieras ver.

Después de todo
has sido tu quien me
ha despertado a mi
y a la enfermedad durmiente.

Está bien.
Tal vez es demasiado
esperar que puedas entender
aquello que cargo
dentro de mi.

Solamente se trata
del viejo tormento.
Estaré bien.
Puedo soportarlo.

Hay algo en esta soledad
que me hace sentir
mucho más vivo
de lo que nunca
pude imaginar.

Compadece.

Disculpa mi atrevimiento
por vomitar
cada vez que escucho
tu estúpido discurso.

Si tanto necesitas
sentirte única
déjame decirte
que estás
muy equivocada.

No sabes cuantas veces
he visto tu sonrisa
en personas distintas.

Puede que sea mi culpa
Que no pueda
ver aquel estúpido mundo
que tanto te enorgullece.

Así que guarda silencio
y deja de darme motivos
para lanzarte
al obscuro
y gélido olvido.

Eres demasiado ingenua
como para pensar que nunca
he visto algo parecido a ti.

¿Te conozco?

Me alejaré de ti
mientras las estrellas
aun me lo permitan
escapar.

Puede que
sólo se trate
de un simple
sueño bastardo.

Un deseo oculto
que me ata
a un pasado de mierda.

Me aferro
a una memoria
obsoleta
y confusa.

Sin saber
que es lo que puede
haber más alla
me adentro a la muerte.

Ya es tarde
para pedir disculpas
y volver después de tanto
a mi único hogar.

No, estoy seguro
que sólo queda
polvo y ceniza.

Hazme olvidar.

He aprendido
   que el vacío
 nunca desaparecerá.

         Resulta
curioso
ver como intentas
     hacerme volver
del sueño
       al que
me sometiste.

Sólo se trata
     de un triste suspiro
    inaudible.

Como puedes ver
      no importa
cuanto
    lo intente
 siempre estaré
      acompañado.

Aquella obscuridad
  carcomiente
que soy yo.

Contemplo
   como es que
    nos vemos perdidos
en la inmensidad
del pasado.

Pero nunca más
   lo he prometido
por desgracia.

Piensa en mi.

Cuento los segundos
que me separan
de la eterna
nada.

El temor
se vuelve a apoderar
de mi.

Por un segundo
espero poder escapar
de lo que es
mi final.

Resulta
increíblemente curioso
que me retracte.

Aunque ya nada me detenga
al momento de saltar
y mis últimos pensamientos
mueran junto a mi.

Respiro
y lentamente las dudas
desaparecen.

El miedo
siempre desaparece
cuando el dolor
es fuerte.

Simple.

Tu que logras ver
a través de las eras
muéstrame el resplandor.

Creo estar ciego
o simplemente
no me permito
adentrarme en mi memoria.

Puede llegar a ser
demasiado doloroso
reconocer mi pasado.

He perdido
tantos buenos momentos
sólo por cargar este
estúpido resentimiento.

Pero si te parece bien
estaría encantado
de recibirte.

Toma mis entrañas
y sujeta la verdad
antes que la podredumbre
pueda escapar.

Cotidiano.

Crees poder
vivir una mentira.
¿Verdad?

Cuando cierras los ojos
y pretendes
desaparecer
el dolor.

Pero nunca habrá
nada tan real como
mi visión.

Los gritos ocultos
siempre clamarán
por ayuda.
Puedo escucharte.

Así que puedes
restregarme todo tu pesar.
No escucharé.

No es mi decisión
sólo me encuentro
en un lugar y un tiempo
inadecuados para mi.