Aquí llace la figura
que siempre soñaste ver
hecha una realidad reconfortante
en la cual poder confiar.
Mi sombra habrá de emerger
en tu hora más oscura, no debes temer
que yo seré tu escudo.
En gélidas aguas
sostengo el momento
en el que las estrellas
brillaron en tus ojos.
sin importar qué tan lejos me encuentre
ni cuánto finja detestarte.
Nunca me cansaré
de decirte cuánto te adoro
mi amada ninfa de mares
ensangrentados y turbulentos.
Mi grito; azote de tormenta
habrá de brindarte aquello que me hace
caminar entre los abismos.
Eres parte de mi vida
y no hay nada en este mundo
o en algún otro que pueda
hacerme retroceder.
Mis manos harán emerger
la luz que el alba ha perdido y ahí
cumpliré mi con promesa.
Sabes que desde siempre
he velado por verte sonreír
incluso si me encuentro distante.
Danzando con la muerte.
Imagen generada por I.A.
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