y una fuerte anestesia controlando cuánto
dolor te permito sentir dependiendo de mi animo.
Siempre haz deseado ser el centro del universo
y esta es tu oportunidad de dar lo mejor de ti.
Ahora chilla cómo el puto cerdo que eres.
Tienes toda mi atención; Pequeña mierda.
Déjame invocar al verdadero demonio
y hacerte sentir cómo un pendejo cuándo
pretendes haber recorrido el abismo eterno.
No descansaré hasta harte roto por completo
e incluso cuándo me ruegues por matarte.
Curaré tus heridas para darte el puto capricho.
Te haré rogar por misericordia hasta el hartazgo.
Sé bastante bien que existen cosas peores
que una muerte rápida, sencilla y limpia
aguardando dentro de mi imaginación.
No pretendas que el eterno escondite
no sea algún tipo de tormento.
No me estás evitando haciéndolo.
He sido el culpable de uno que otro sufrimiento.
Decidiste venderme tu alma y deberás
pagarme de una manera u otra manera antes
de decidir que ya no eres humana.
Te hace falta algo que sólo yo puedo
llegar a concebir contigo.
Pierde la confianza que forjaste.
Ten un pésimo día.
Yo no soy el culpable
sólo has visto aquello que
te esforzaste por evitar.
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