sábado, 9 de febrero de 2019

Sabor a venganza.

Como un enjambre
plaga de mi memoria
e incierto recordatorio
de la desesperanza.

Miles de recuerdos
encajándose
cual frío cristal.

Cada día se convierte
en un reto de supervivencia.
Mis propias manos.
Mi propia falta de cordura.

Esto tendrá sentido
si es que logro hacerte sonreír.

Puede que mis palabras
no tengan sentido
pero rata de recordarlas
ciando el día llegué.

Desde lo lejos
un negro horizonte anunciará
el día prometido.

Al final
sólo quedará esperar
que mis dedos helados
alcancen tu rostro.

el frío de mi alma será
lo que termine por arrastrarte a Interzona.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario