Vigía.

Ahora que me encuentro
En una tierra tan distante
como irreal
y te observo sin estar presente.

Deja atrás toda duda
si estaré bien o mal
si soy lo suficientemente fuerte
para soportar el mañana
o simplemente escogeré
la salida fácil.

Te esperaré del otro lado
con una sonrisa en el rostro
y una botella
jugueteando en mis manos.

No dejes que el humo
el resplandor y las tinieblas
quebranten tu cordura.
Sólo intenta recordar tu nombre
y todo estará bien.
O al menos eso creo.

Al menos lo intento.

Busca en mi mirada
la verdad oculta
y entenderás mi voluntad.

Sólo quiero
tomarte de la mano
y escapar
hacia donde el viento
nos lleve.

Deja de preocuparte
por lo que las estrellas
puedan susurrar.

Sin importar
lo que pueda
suceder
al ocultarse
el sol.

Seguiré a tu lado
aunque sea sólo
como un espectro.

Incluso cuando
te encuentres
sumergida
en la más densa
obscuridad

Espinas.

Es cierto; intento esconderme.
Por ridículo que pueda legar a parecer
el miedo me paraliza
cada vez que pienso en ti.

No puedo dejar que sigas siendo
mi temor más profundo.
Nunca fuiste tan importante.

O al menos eso es
lo que quiero creer.

El mundo puede sentir
tu esencia impregnada en mi cuerpo
pero eso no significa
que sea tan débil como tu.

Por  desgracia; mi alma
puede llegar a ser demasiado tóxica
si no has muerto.

Esta es mi naturaleza.
Mi verdadero rostro.

Pulso.

Incluso cuando
no puedo asegurarte
que mañana
seguiré esperándote aquí.

Prometo hacerlo
con lo poco que me queda
de vida.

Siempre he sido
demasiado inseguro
para permitirme
confiar ciegamente.

Esto es todo
lo que necesito para sacrificar
mi vida.

No hay nada
que pueda hacerme
retroceder
y alejarme de ti.

Te prometo que sólo
me marcharé cuando se agote
mi vida.

Risa incoherente.

Me niego rotundamente
a dejar que seas tu
quien termine pagando
por mis innumerables pecados

Arroja mis cenizas
y nunca vuelvas
a aquella dimensión
de cielos rebeldes
e insectos esquizofrenicos.

No importa cuanto
pueda llegar a detestarte
este no es tu destino.

No eres a quien buscan
las llamas azules
que consumen
el cuerpo y alma
ese tormento es sólo mio.

Hablando solo.

Habiendo tantos senderos
tuve que escoger
el único sin un final.

Quisiera saber
como regazar
comenzar desde cero.

Retroceder
hasta aquel día
y esta vez
no cometer
el mismo error.

Aunque sé lo necio
que suelo llegar a ser
y no hay manera de evitarlo.

Después de todo
sólo sigo a esta voluntad
con pésima suerte.

Eterno.

Sin importar
hacia a donde
me dirija
siempre termino
regresando
al mismo lugar.

Cual viajero errante
perdido en el sonido
del segundero.

El día y la noche
no significan nada.

Sólo hay algo
que de verdad lamento
después de todo
esto es sólo
una manera
de borrar todo.

Se supone que algo
está terriblemente mal en mi
y debo intentarlo.

Regresar al mundo
que me ha rechazado.