lunes, 3 de junio de 2019

Memoria perdida.

Mi futuro se convierte
en simple polvo sangrante
mientras observo el horizonte.

Escucho mis órganos
convertirse en piedra.

Cuento las horas que faltan
para liberarme
de este cruel tormento.

Un relámpago eterno
quebranta la eterna penumbra.

Haciendo escuchar la ira
de los miserables
y eternamente condenados

Al terminar la música
mi alma por fin desaparecerá.

Lo que importa.


¿Acaso crees posible
que pueda mirarte
con algún desprecio?

¡Oh!
Hermana mía
si supieras
cuanto te adoro.

Nunca dudarías
de mi devoción.

Prometí jalar el gatillo
en el momento oportuno.

Lo que sea para
hacerte sentir mejor.

Olvida cualquier culpa
que el insidioso silencio
pueda traer consigo.

Sabes
demasiado bien
que sin importar
lo que el tiempo dicte.

Tienes mi alma
en tus manos.

domingo, 2 de junio de 2019

Inmundicia.

Nunca habría imaginado
llegar a conocer
a alguien tan desesperado
por hacer notar
su miserable existencia.

Su enorme sonrisa
sólo es una mala imitación
que busca enmascarar
de una inmensa miseria.

Un ser tan lamentable
que ruega
con gran desesperación
ser liberada
de todo su pesar.

Me veo tentado a hacerlo
pero mis manos no se mancharán
con tan repugnante elixir.

Cerebro fundido.

En el rincón más profundo
de la desesperanza
Emerge del destello
la verdadera razón
para seguir mi camino.

He visto mil sonrisas
llenas de hipocresía.

Aprendí que la esperanza
es la peor debilidad.

Mientras que el odio
puede llegar a ser
lo que me mantenga con vida.

Sólo tengo que
avivar las llamas
y de algún modo
encontraré mi destino.

¿A donde se han ido
mis aspiraciones?

Observo pasar el tiempo
en los extraños rincones
de la muerte en vida.

sábado, 1 de junio de 2019

Tambaleante.

Enciendo un cigarrillo
arrastro los pasos
y exhalo lentamente.

Puedes intentarlo
las veces que quieras.

Una herida superficial
a pesar de haber
atravesado mi corazón.

Ni siquiera puedo sentir
como me desangro.

Esta pésima suerte
por fin se ha cobrado
todos mis sentidos.

Quisiera seguir corriendo
pero estoy harto de escapar.

Sombra ambulante.

No existe compasión
para los desgraciados
que nos hemos osado
a entregar el alma.

Fui tan ingenuo
como para creer
que algún día
encontraré la libertad.

Ese ha sido siempre
mi más grande error.

Una simple quemadura
con este cigarrillo
logrará hacerme
sonreir de nuevo.

Sólo necesito
recordar como
solía sentirse
estar vivo.

Verdugo onírico.

Al decender la penumbra
pude encontrarme
trente aquella criatura.

Puedo escuchar
su triste lamento
suplicando perdón.

Demasiado insignificante
como para merecer
aquel privilegio.

He muerto
por su mano
miles de veces.

¿Tan crueles han de ser
las llamas del  infierno.

¿Que arrojan de rodillas
al mensajero de la muerte?