Dulce cadáver.

Un pasado perdido.

y una esperanza que

jamás será recuperada.

Nuestro pasado está muerto

El añoro ha desaparecido.

Dame tu corazón

y hagamos del sacrificio

nuestro más grande

placer de placeres.

Amor de mi vida.

Eres lo suficiente

para ganar aquella

maldad interna.

Habré de amarte
más allá de la grieta
y lo humanamente posible.

Eres lo único que me importa.

Menciona mi nombre

al coger con tu pendejo.

Yo podré escucharte.

Revela la imagen

que has guardado

en lo más profundo.

Mis palabras no caen

en oídos sordos

y me has demostrado

que no soy cualquier

otro de tus idiotas.

Así que acércate

y déjeme maldecirte

y escupir tu rostro.

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Memoria perdida.

Nunca quise alejarte
pero esa era era

mi única opción.

Pero siempre

te recordaré.

En cada pesadilla.

En cada gota de sangre.

En cada herida.

Dime que por siempre

recordarás mi veneno.

Aquella herida punzante

que el tiempo me ha brindado.

Nada que un tumor no arregle.

Lamento incomodarte

pero en mi realidad

no existen los 

finales felices.

Así que puedes

olvidarte de cualquier

intento de redención.

No hay una sonrisa 

en mi rostro.

Sólo una pesada

y fúnebre mirada.

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No hay límites

Pudiera parecerte cruel

y de hecho lo es

pero al mismo tiempo

se trata tan sólo

de otra mala jugada.

Que mis vicios

y adiciones

no te engañen.

No estoy tan desesperado.

Esta historia ni siquiera

necesita de tu presencia

pero sería bueno apresurar

un poco los viles resultados.

Mira cómo comienza

aquella magia olvidada.

El renacimiento.

Los escombros.

No tienes lo necesario

para hacerme olvidar

aquel dolor que sigue

carcomiéndome.

Con cada segundo

demuestras cuánto

necesitas mi pulgar.

Mientras que yo 

no puedo dejar

de preguntarme

¿Cómo es que

llegamos a esto?

Extiende una red.

Eleva una plegaria.

No ha dejado de llover

pero al menos me ha

dejado de importar.

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No pierdo nada.

El tacto del recuerdo

puede llegar a ser desagradable

ante las malas costumbres.

Aquello que nos ha traído

justo a ésta vil trampa.

Camino y hay pocas cosas

que aún puedan sorprenderme

pues mi vida se ha ido.

Si bien, tal vez no mi pulso

aquello que se ha corrompido

lo suficiente cómo para poder

separar ésta y otra realidades

se vuelve un mejor candidato.

No es aconsejable hablar

con recuadros amarillos.

Sabes que debo deshacerme

de tu vil existencia antes

de dejar atrás éste universo.

La vida y la muerte

me han encarado

y no hay respuesta.

El uno atrae a lo otro

en un ciclo interminable.

Ahora intenta detenerme.

Dame un sólo motivo

para segur con vida.

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Esa historia.

Hoy en día

estoy mucho peor

de lo que pudieras

llegar a imaginar.

Soy el David

que no tiene

a su fiel honda.

Sin embargo

tengo algo mejor

que las heridas

de mis puños.

Esto no es

un simple conflicto.

Es una guerrilla.

Y tú eres tan sólo

la presa con la que

he de distraerme 

un momento.

Mi camino

nunca podrá

converger contigo.

No me molestaré

en darte el gusto.

Lee entre líneas.

No me refiero

al polvo que necesitas

para sentirte bien.

Al menos mis vicios

no me han llevado

a la total degradación

y esos es suficiente.

Demuestro

mi superioridad

con mi simple

y vil presencia.

Eso es suficiente.

Te declaro

oficialmente

mi puta.

Desagradable.

Estúpida.

Miserable.

Y es que si

te sientes aludida

mereces que

te odie.

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Un rostro quebrado.

Siete espectros

son mis verdugos

en ésta tierra de noche

y cruel abandono.

El viento gime

con el retumbar

del viejo reloj.

Otro trago.

Nuevas nauseas.

Coágulos.

Éste malestar

terminará 

por matarme.

No me quebraré.

Hoy volví a vomitar

parte de mi hígado.

Importa poco

en realidad.

Vomito mis entrañas

Peleo con la policía.

La vida es buena.

Ya nada puede

detenerme.

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Hasta la próxima.

Tan sólo quisiera

que de haber buenos momentos

puedas llegar a recordarlos.

Sé que estoy muriendo

y la verdad no me importa.

Morí en el momento

en el que decidiste que por fin habría

de ser tan contagioso cómo 

para permanecer a mi lado.

Y no puedo culparte.

Mi mortalidad se asoma

por cada uno de mis versos

pero creí que eso no te importaría.

Después de todo te he enseñado

todos deplorables mis secretos.

La manera de conseguir

éste cántico tan decadente y oscuro

cómo para merecer ser recordado.

Pero aquí me encuentro.

Por una buena razón.

Sé que caerás y no quiero

llegar a perderme

tal espectáculo.

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