Sálvame de este abismo
al que me he condenado.
Reina de mis sentidos.
¿Acaso puedes imaginar
cuánto es que te necesito?
El tiempo se enrarece.
Podría decir que nada ha
pasado desde la ultima vez.
Incluso en mis últimos días.
Sigo recordándote cual figura
de blanca porcelana.
Tu blanca piel de cadáver.
Nihilismo y desesperanza
encarnada en mi carnaza.
Valla que sigo masticándote.
Lo suficiente para hacer
de tu aroma mi perdición.
Pero has de ser mi guía.
La única manera en la que
encuentre la verdadera paz.
Mírame, clama mi nombre.
Imagen generada por IA
https://dream.ai/create
No hay comentarios.:
Publicar un comentario