viernes, 26 de octubre de 2018

Puedo continuar.

Estoy bien

Sólo
el rojo profundo
emergiendo
de mi carroña.

Conozco
bien mi destino.

Al viajar
entre
especros
sin nombre
ni rostro.

Necesito sangrar
un poco.

Sí.
Un poco más.

Enciende una chispa.

He corrido por esta ciudad
demasiado tiempo
cegado
por el velo del desprecio.

Más nunca
podré escapar
del lazo marchito.

Al pasar la rabia
y escuchar tu voz
retumbando en mi cabeza.
Vuelvo a sonreír.

Sin un motivo
para dar marcha atrás
y salir del terrible frío.

Me he vuelto
un enfermo del alma
atesorando cada instante
que aún puedo conservar.

Xll - XX

Tengo miedo de verte.
Me asusta el hecho de que la realidad sea tan y como la sospecho.
¿Y si así es?
Serás una musa lejana.
Tus flores me brincarán en el hombro como castigo eterno.
Tus ojos se volverán espacio en negro.
Tu existencia será esa escencia infinita del limbo...

jueves, 25 de octubre de 2018

Lo prometo.

Sólo importa
llegar al desenlace correcto
y al final
detener ambos sufrimientos.

Perdido en la lejanía
buscando
las llaves de la eternidad.

Se escucha
en un distante silbido
la promesa
nunca perdida.

Nunca he de confiar
en nadie.
No de nuevo.

Quisiera
recuperar la fe perdida
y volver
a creer y soñar.

Pero se ha perdido
en un abismo
del inmenso mar.

Si puedes
escuchar mi llamado.
Guarda
un poco de esa felicidad.

Puede que mañana
necesite
recordar como es estar vivo.

Al romper el alba.

Al sonreír
en el ocaso de la vida
orgulloso
de la falsa victoria.

Cuando
no sólo perdí
aquello
que solía dar sentido
a mi ser.
En realidad perdí algo más
mi humanidad.

Todo mi mundo
remplazado.

Por una inexistente
presencia
habitando
sólo en los confines
más obscuros
de mi mente.

Después
del gran espectáculo
no queda nada
por lo cual
seguir
en este plano.

Nunca lamenté despedirme.

miércoles, 24 de octubre de 2018

Emergente.

Siempre he de volver
desde las cenizas.

Tal vez
en algún
momento
quiera
volver
a saber
como
se siente.

Perdí la cordura
tan simple como podría sonar.

Más allá
de la
tenue
barrera
entre
Negación
y Carcajada.

He llegado a conciliarme
con los azares del destino.

He
legado
demasiado
lejos
No hay
lugar para
arrepentimiento.

Cielo.

Tumbado en la arena
al anochecer taciturno
bajo la lluvia.
Una llama aliviará
el terrible frío.

"No vale la pena
si el camino sólo puede terminar
en laguna de desesperanza"

Escucho la voz encantadora
perdonar
mi más grande fracaso
es algo que no puedo aceptar.

Puedo escuchar su voz
reclamando mi rendición
desde lo alto.

Donde el viento
reclama la necesidad
y el sol
es despiadado verdugo.